Garnet, Montana, es el pueblo fantasma más intacto del estado, y algunas personas sostienen que en realidad está embrujado.
El pueblo creció rápidamente en el siglo 19 después del descubrimiento de oro y plata. Pero por la década de 1940, las minas se fueron a la quiebra.
Garnet se vació, y ahora las únicas personas que llegan son turistas y voluntarios seleccionados por la Oficina de Administración de Tierras. Los voluntarios dan los tours por la zona, venden recuerdos y ayudan con el mantenimiento del sitio.
"Es para la gente que ama el aire libre y quieren ser libres por unos días, no hay electricidad, no hay Wi-Fi gratuito y tampoco agua potable, pero hay senderos para explorar y mucha actividad física por realizar.
Los historiadores del estado afirman que una vez que el sol se oculta en Garnet, los espíritus de los residentes históricos de la ciudad cobran vida.
Se mencionan muchas historias sobre el lugar, sombras y apariciones vistas a través de las ventanas del pueblo.
El sitio web oficial del pueblo no menciona nada sobre los fantasmas, aún así, la autenticidad histórica de la población y su cercanía a la naturaleza son suficientes para atraer a algunos voluntarios que vuelven año tras año. Un matrimonio ha estado en el pueblo como voluntario por 30 años.
La ciudad hace alquiler cabañas para personas suficientemente atrevidas durante el invierno. Pero cuidado, dicen que el invierno es cuando los fantasmas de Garnet son más activos.
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